Hoy os presento a mis compañeros de piso. Además de María, la dueña de la casa y de mí hay otros dos seres vivos en casa. El primero es Bani y es el perro de María. Tiene 13 años que para ser un perro es un poco viejillo (si cada año de perro son siete años de humano pues echale cuentas...91 años!!).
No ve muy bien.
Tampoco oye muy bien.
Pero es muy simpático y te sigue por toda la casa.
Su nombre viene del
spanglis, porque fue un regalo de una inglesa que dijo que se llamaba Barney (foneticamente
baarnii) pero con el uso se quedó con Bani que era más práctico (el perro asumió bien su cambio de nombre, ya no responde a Barney, lo he probado)
Y el otro compañero (en este caso compañero de habitación) es un cactus de reciente adquisición. Yo le iba a bautizar Espe pero a Carmelo le pareció que pegaba más Gallardón y este es mi cactus de Madrid.
Se pasa todo el día haciendo la fotosíntesis y no le culpo (yo si pudiera tambien la haría)
Jaja, te ha faltado darle un abrazo al cactus, como hice yo con e c...........
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